Juan y su aventura de pesca

En un pequeño pueblo junto al lago, vivía un niño llamado Juan. Cada vez que su mamá iba al río a traer agua, Juan pedía permiso para acompañarla. Mientras su mamá llenaba los cántaros, Juan y sus amigos se acercaban a la orilla.

 

Con sus cañas de pescar hechas de ramas fuertes, ellos dejaban caer el anzuelo al agua y esperaban pacientemente. A veces, el agua estaba tan clara que podían ver sus propios reflejos como si fueran peces curiosos mirándolos. Entre risas y charlas, los amigos disfrutaban del aire fresco y del canto de los pájaros.

 

Un día, Juan sintió un tirón fuerte en su caña. ¡Había pescado algo! Con cuidado, enrolló el sedal, y del agua emergió un pez brillante con escamas de colores. Sus amigos lo aplaudieron emocionados. Juan, sonriendo, liberó al pez para que volviera al lago, contento de haber vivido una pequeña gran aventura.

 

Desde entonces, cada vez que su mamá iba por agua, Juan y sus amigos esperaban esa mágica sensación de paz, amistad y descubrimiento junto al lago, enseñándoles que lo más valioso no siempre se atrapa… a veces solo se comparte y se disfruta.

Test de comprensión lectora

¿Qué hacía Juan cuando su mamá iba a traer agua?

¿Qué usaban Juan y sus amigos para pescar?

¿Cómo describen el lago mientras pescaban?

¿Qué ocurrió cuando Juan sintió un tirón en su caña?

¿Qué hizo Juan con el pez que atrapó?